5. El derecho de caminar libremente.

Vauban, Alemania. Foto de Martin Specht para The New York Times. Extraído de http://www.plataformaurbana.cl/.../el-caminar-y-la-vida.../


 

Al leer un artículo de opinión escrito por Pedro Kumamoto, del cual pongo el link más abajo, me hizo pensar en muchas cosas: en la adultez, los viejos amigos, mi vida actual y en caminar, entre otras cosas. Este tipo de ideas son las que hacen a Pedro Kumamoto un personaje tan agradable. Cuando lo leo me identifico con él, e imagino que a mucha gente le pasa igual.

Puede sonar tonto, pero me hizo acordarme de todo lo que he caminado y cuanto he dejado de hacerlo desde que soy papá; tal vez desde antes.

Pedro dice sobre caminar "es una de las acciones que más disfruto. Es un verbo que conlleva a otros consigo: meditar, contemplar, imaginar, resolver, llorar, tomar de la mano, gritar o reír." No podría estar más de acuerdo con él.

¿Qué fue lo que me motivó en un primer momento? A mí siempre me gustó la aventura de recorrer, hacer ejercicio, conocer y explorar. Muchas veces intenté atravesar los mismos caminos que recorría en el auto, pero a pie.

¿Mi primera vez caminando? En segundo de secundaria, cuando por fin mis papás me dejaron irme solo a la escuela. De una manera que no tengo aún clara, me levantaba temprano, desayunaba, me bañaba y a las 6:45 am ya iba en rumbo. Recuerdo el ardor en la cara y las manos por el frío, pero también recuerdo haber tomado una foto al sol saliendo por una barda con mi celular Benq al cual le cabían 20 fotos.

En la secundaria y preparatoria representó la independencia respecto a mis papás. Fue pasar tiempo con amigos con los cuales he dejado de hablar, y otros con quien sigo en contacto aún: Mauricio, Arely, Ilse, Pedro, Juan; todos ellos fueron grandes compañeros de caminatas. Siempre había una buena excusa para caminar y compartir tiempo con las amistades: a veces era por ir a visitar a novias o alguna pretendiente, otras muchas veces caminamos para buscar a algún amigo o amiga que no estaba en casa. También caminaba para ahorrarme el dinero del camión, para tardar más en llegar y para escuchar música en el camino, con mi mp3 y más de 100 canciones descargadas y pirateadas por medio de Ares.

Ya en la universidad vinieron otros amigos como Héctor, Noemí, Dania, Ana, Eli, Cristina, Edith y Edgar con los cuales también pasé varias horas bajo el sol. Al salir de la escuela caminábamos desde la escuela al centro de la ciudad a tomar el camión, aunque casi siempre nos detuvimos en el camino para apreciar la arquitectura de las casas de Lomas del Santuario, imaginar cuál de ellas parecía más salida de una película de terror, discutir y debatir con alguno que otro defensor del neoliberalismo, ver artesanías, escuchar música en la plaza de armas o refrescar la sed en alguna cantina cercana. Casi siempre las mismas cantinas de precios accesibles: El Mogavi con sus luces rojas y cegadoras al interior, el Reforma donde tenías que sujetar bien tu vaso o le salían patitas  y se iba caminando (lo digo por las cucarachas que había en el lugar) y de vez en cuando el San Juan, cuando nos sentíamos burgueses y queríamos ser mainstream. Aún recuerdo cuando afuera del Reforma asaltaron a un viejito, y todo el contingente de antropología salió de la cantina a tratar de alcanzar al asaltante sin gran éxito.

¿Tú por qué dejaste de caminar? Cada quién tendrá sus razones particulares. ¿tener acceso a un auto? ¿la inseguridad? ¿el calor? Yo tengo bien claro que mi hermano estaba a punto de comenzar su carrera como caminador cuando esta se vio interrumpida. Alrededor de los 12 o 13 años, cuando se dirigía a la misma secundaria donde yo estudié, tomando la misma ruta que yo caminé durante dos años fue asaltado y robado frente a la Divina Providencia por un joven en bicicleta, antes de que la bicicleta fuera políticamente correcta. Solo le quitaron el celular. Unos meses después, tomando la misma ruta, pero ahora de vuelta desde la escuela hacia la casa, el mismo joven en bicicleta intentó asaltarlo de nuevo; mi hermano esta vez supo actuar un poco mejor, o peor según el punto de vista, pues supo correr antes de que le cerraran el paso hacia donde estaban algunas conocidas lo que le evitó ser robado de nuevo.

A partir de ahí empezó dentro de él un miedo por caminar por las calles solo, un sentimiento de inseguridad que no le permitió volver a sentir confianza de caminar solo por las calles hasta alrededor de los 15 o 16 años. De igual forma, él nunca pudo disfrutar caminando lo que yo. Nunca visitó a su novia caminando y luego corrió hacia casa de noche porque la hora en que acordó llegar se había agotado. Nunca caminó entre las calles cercanas a la casa, donde el mayor peligro parecían ser los perros sueltos que podían atacar en cualquier momento y desde cualquier dirección, nunca recorrió el centro de la ciudad caminando. Los años posteriores se pusieron peores pues fue cuando comenzaron las oleadas de violencia e inseguridad por la guerra contra el narcotráfico y sus consecuencias locales como incremento de la inseguridad, asaltos, extorsiones y asesinatos. Aunque yo quisiera que mi hermano hubiera podido vivir como yo y que significara para él lo que significa para mí, caminar es una parte de mí, no de él.

Es aquí donde reflexiono sobre cuántas personas serán las que nunca tuvieron la posibilidad de caminar libremente y encariñarse con ello como lo hice yo. Ya sea por la inseguridad, el diseño de las ciudades que favorece al automovilista sobre el peatón, o el abrasante y desértico calor de nuestras ciudades norteñas. Pienso en todas las mujeres que nunca han caminado las ciudades por miedo a ser piropeadas, acosadas, violentadas o aún peor, violadas o asesinadas. En todas las parejas homosexuales que temen, o lo hacían más hace unos años, de salir a la calle tomados de la mano por miedo a la violencia de la que pudieran ser víctimas, que si bien les va eran solo gritos, aunque algunas veces terminaban en agresiones físicas.

Como dice Pedro, "En este contexto es importante ponernos una nueva meta nacional: que quien lo desee se pueda volver una persona caminante. "

 

Notas sobre mi texto anterior:

  • Este texto lo publiqué originalmente en mi Facebook personal, el 19 de septiembre de 2017. Aunque hay algunas cosas que ahora diría de una manera distinta, veo una continuidad entre esa forma de escribir del Manuel del pasado y el Manuel del presente. Me gusta lo que escribí en ese momento, y lo respeto tal cual lo cree, por lo que solo hice pequeñas modificaciones de palabras específicas. Tal vez en algún momento vuelva a construir un nuevo texto sobre el derecho de caminar libremente, ampliando lo que dije en ese momento.
  • Caminar sigue siendo una de mis actividades favoritas, y en los últimos años lo he retomado mucho. Desde entonces, empecé a correr en parques de mi ciudad como la Ciudad Deportiva, el Parque Metropolitano El Rejón y el Parque del Encino, además de practicar senderismo. A veces también corro por mi colonia y en el centro de la ciudad.
  •  Pedro Kumamoto es un personaje del que tal vez mucha gente ya no se acuerde, pero en 2014 y 2015 tuvo una gran relevancia. Kumamoto fue parte de un movimiento que se llamó Wikipolítica, el cual buscaba “ciudadanizar la política”. Como parte de estos esfuerzos, Kumamoto comenzó una campaña para ser un candidato independiente en el municipio de Zapopan, Jalisco, campaña en la que salió victorioso. Kumamoto fue importante en su momento, pues representó para los millenials, un intento de hacer la política de una forma diferente, desde las calles, pero no desde un punto de vista populista sino pensando que la organización social podría generar un cambio, y que los jóvenes universitarios podíamos organizarnos para humanizar la política; hacerla más cercana a la gente y generar propuestas mejor pensadas desde una lógica ciudadana y no político / electoral. Después de su diputación independiente, formó un partido político local llamado Futuro, aunque recientemente se incorporó a MORENA. A pesar de la esperanza que representó para muchas personas, posteriormente dejó de ser un personaje agradable para algunos de sus exaliados y seguidores, sobre todo por problemas en la conformación del partido Futuro, donde hubo controversias con parte del equipo con quien se alió.

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